Sé que estás
ahí, que nunca me fallarás. Sé que estás ahí que puedo contar
contigo, porque me quieres, y porque te importo.
Confío en ti, sé
que no me fallarás, que cuando te necesite acudirás. Soy consciente
de que me apoyas en cada segundo, en cada problema y en cada
lágrima.
Me entrego a
ti, te entrego mi vida, sin pensarlo y dudarlo. Porque te amo y sé
de sobra que sólo quieres mi bien.
Contigo mis
problemas serán risas, y mis tristezas serán alegrías. Me secarás
mis lágrimas y abrazarás mis melancolías.
Porque me
quieres, porque te quiero, porque te amo, porque me ayuda. Gracias.