Querida Valeria

No considero a bien de tu parte, tu reacción a la entonación de un email
que tú sabes bien que está supeditado a la percepción del lector, y
primordialmente a la naturaleza de la comunicación.

Pienso que no hay motivo ni tampoco tienes razón, por la que yo tenga que
pedirte en mala forma que deseo tener un gesto bonito, y de amor para ti.
Si te ofendí, te ofrezco mis disculpas y te pido me permitas componer
las circunstancias en la que el presente fue ofrecido.
Te prometí ese regalo, y te lo compré con tanta ilusión, pensando en ti, y porque
pensé que te agradaría. Este regalo es especial por el motivo de tu
cumpleaños, el primero de tus cumpleaños que pasamos juntos.

Si me vieras podrías entenderme. Pero lamentablemente no me queda nada
más que escribir este e-mail porque quiero aclarar que es lo que pasa entre nosotros. Quizás no
es el mejor medio, pero de alguna manera tengo que decírtelo.

No he dormido bien porque no estas a mi lado. Desde que no estás a mi lado solamente duermo un par de horas diarias, insuficientes para
levantarme a trabajar. Me acabo de despertar para escribirte esta
carta . Espero tu respuesta, una aclaración…algo de tu parte que me permita volver a estar en tu corazón, te necesito, mi amor.

Carlos
Damos las gracias a Carlos por esta bella carta de amor y confiamos en que Valeria vuelva con él.