Te escribo para decirte que te amo, te quiero, te extraño; pero sobre todo que como esposa y madre tu labor admiro, por todo el respeto que me tienes a mí y a mis hijos… Amor, te aseguro que Dios todo lo ve y lo toma en cuenta, yo como tu esposo que puedo decirte, sólo la verdad, eres la mujer más buena que existe, tu bondad es tanta que no la merezco.

Como madre, pienso que mis hijos tienen la mejor. Siempre pienso en ti mi amor, no hay día que no lo haga, a veces pienso… Qué estará haciendo?… Durmiendo? Son las 5:00 de la mañana! Qué tonto soy! Te quiero mucho, eres mi primer pensamiento en la mañana y la mujer de mis rezos al irme a dormir, al irme a mi cama, espero en un año cobrártelos…

Te amo corazón nunca lo olvides, eres lo que le da sentido a esta separación, se que un año se pasará volando, sigue con tu decencia, con tu amor, y tu fidelidad haciendo depósitos en el banco de mi alma, que Dios mediante cuando vuelva y quieras hacer un retiro; no habrá caja fuerte en donde lo puedas guardar… Cuídate mucho y a mis hijos también.

Gracias a Eduardo por compartir sus pensamientos