Que difícil amor saber que en mi corazón te encuentras, que tu propuesta de matrimonio de repente me emocionó, pero a la vez me dio tristeza porque sé que de aceptarla sería un futuro incierto.

Estoy  sola sin familia y a mis 40 años tengo que actuar con la cabeza y no con el corazón,

No es interés, es seguridad; mi vida no ha sido fácil y no quiero volver a cometer errores. Me duele en el alma porque te quiero y Dios te mando a mi vida cuando más te necesitaba.

Mi amor,  me da miedo comenzar de cero, solo sé que confío en Dios y el sabrá guiarme para tomar la decisión correcta.

¿Lo entiendes?

Te pido un tiempo para reflexionar.

Espinosa

Damos las gracias a Espinosa por esa carta tan sincera. Esperamos que su decisión la lleve a la felicidad.