Tengo algo muy importante que decirte.
Todos y cada uno de esos
momentos junto a ti se quedaron grabados en mi memoria, las miradas, las
risas, los besos, las caricias, la ternura, la locura, el
placer.
Recuerdo lo que sentía cuando estaba abrazada a tu cuerpo, escuchando la melodía
del latir de tu corazón, tus brazos rodeándome, dándome abrigo y protección.

Tu imagen la conservo en mi retina, desde tu llegada hasta tu marcha.
Desde ese primer encuentro, tu ser fluye por mis venas…eres parte de mí.
La despedida se encargó de borrar mi sonrisa…por mi mente mil preguntas
agolpadas…

¿Cuándo volveré a verle? ¿Me echara de menos tanto como yo a él?
Te fuiste de mi lado y te llevaste gran parte de mí…
Me diste tanto en tan poco tiempo…que se te olvido enseñarme lo más
importante…
algo que aunque pase el tiempo, aún no he aprendido…
No me enseñaste a estar sin ti.
Dolores
Damos las gracias a Dolores por esta preciosa carta.