No tienes porque agradecerme mi bebe, no puedo hacer nada, si me tienes atrapada y sin salida pero estamos juntos a la vez, quizá estés lejos, pero camino contigo, sabiendo que he de encontrarte mas tarde a través del teléfono, que es como si estuvieras conmigo, no me tocas pero igual te siento, siento todo tu ser y eso me alimenta, tu cariño me llega igual con un calor que me invade y no me suelta y no se si es mi imaginación pero duermo junto a ti y escucho tu voz diciéndome no temas, yo cuido tus sueños.

 

Es hermoso saber que tú me quieres como yo. Saber que en un lugar del mundo ambos sepamos que alguien piensa en ti.

Es hermoso, y va más allá de lo físico porque hasta cuando hablamos nos emocionamos de la alegría de saber que compartimos algo hermoso e indescriptible. Te conviertes en mi fantasía preferida que de pronto se hace realidad en mi mente.

 

Tocaste fuerte mi corazón y se que en ti sucede lo mismo. Somos un solo pensamiento, un solo sentir, por eso no podemos vivir separados, nos necesitamos. Es cierto cuando tu me dices que te pertenezco, pues aunque no te lo diga tu también a mi me perteneces.

 

Tú eres ese tesoro escondido dentro de mi corazón. Una dulce canción a mis oídos, quiero tu alegría que a la vez es la mía y tu tranquilidad interior, sabiendo que puedes confiar, pues no te voy a fallar, tu mejor amiga y tu amor a la vez, que sepas y que sientas que tu nos estas solo, que me tienes a mi, cuando tú más me necesites.

 

Nos vemos mañana, porque es como si te viera con los ojos del alma.

 

Un beso inmenso para ti, ángel de mis sueños.

 

Tu incondicional de siempre, Mirtha.

 

Gracias a Mirtha por esta excelente carta de amor