El motivo de la presente es para contarte un poco de lo que me paso en mi vida estos últimos meses y disculparme por no cumplir con mi palabra y dejar tantas cosas pendientes entre tú  y yo.

Viendo que la enfermedad de mi hija  iba mejorando decidí  marcharme a Argentina, lejos de las presiones y acusaciones.

Las cosas pasaron muy rápido y no pude avisarte. Unos amigos que conocí me ofrecieron un trabajo en una empresa de gaseosas, un trabajo que valía la pena.

Después de dos semanas decidí ir a verte, tenia tu teléfono, el nombre de una de las clínicas donde trabajabas, para mi era suficiente  para encontrarte, pero no me esperaba una noticia que lo cambiaría todo.

Hable con mi papa y me dio una  terrible noticia, mi hija tenia una linfocitosis  asociada a una leucemia. En el momento de la noticia  me encontraba en Buenos Aires a punto de tomar el bus  pero la noticia cambio mi rumbo y pensando en mi hija compre pasajes para regresar a Bolivia.

Actualmente mi hija esta con quimioterapia; es duro verla llorando todos los días por las agujas, ¿Te imaginas como me siento? Solo espero poder verla sonreír por unos segundos y que no me vea llorar.

Es por eso que no pude hablarte y contarte lo que pasaba, por que todo se centraba en mi hija en ese momento.

En estos últimos días todo va mejorando, al fin un respiro, una sonrisa que me ayuda a vivir, la salud de mi hija, se pone mejor cada día.
Su deseo más grande es que la abracen todo el tiempo y  en especial quiere una computadora,

La verdad es que estoy feliz por el milagro que esta pasando, sorprendentemente el extracto de una planta   la esta ayudando a normalizar los niveles de glóbulos blancos en su sangre.

Patricia: espero que me perdones y comprendas, pero ahora mi hija es mi prioridad.

 

Alejandro

 

Deseamos que la hija de Alejandro siga en su mejoría, y que Patricia le perdone.